martes, 7 de mayo de 2013

Milagro tras milagro



No. No esperen ustedes que entre en grandes teologías o en hagiografías a la clásica usanza… Voy a hablar de milagros pero de los de andar por casa y de los grata y maravillosamente sorprendentes…

Verán. Mañana el Grupo de Teatro La Salle de Santander vivirá el pre-estreno de su montaje de este año: Blancanieves Boulevard. No sé si saldrá bien o mal pero, francamente, es lo de menos… Creo que el triunfo ya está conseguido antes de representar, antes de salir a escena. Nueve meses de trabajo de un grupo de adolescentes y jóvenes, aficionados, día a día, viernes a viernes, sábado a sábado ya son un inmenso y maravilloso triunfo, un milagro como hay pocos… Sé, además, que lo harán muy bien y el espectáculo será bueno y merecerá la pena. Lo dan todo, absolutamente, en escena y en los ensayos. ¿Se puede pedir más?... 

Un grupo teatral que nació hace ocho años y que, tras siete montajes y miles de espectadores, contra todo pronóstico no sólo está vivo sino que goza de muy buena salud y de un reconocimiento significativo. Otro milagro tal como están las cosas. Y ya puestos, un grupo que se retroalimenta a sí mismo siendo capaz de hacer que los más veteranos tomen las riendas ayudando a los nuevos que año a año van entrando, transmitiéndoles no sólo un estilo de hacer teatro sino, sobre todo, de ser grupo, de ser personas que trabajan en equipo, que están convencidas de pelear juntas por sus ideales, que buscan hacer algo bueno, dar gratis a otros por el mero placer de hacer que esos otros disfruten… Un grupo de personas donde lo que importa es el fondo y que viven el teatro como su apasionante excusa para lograrlo. Me admira que su pasión por el teatro sea en realidad una pasión por vivir como un estilo de persona volcada a y hacia los demás. Creo que es la razón de ser del grupo desde sus orígenes y parece increíble que esté metido hasta el tuétano en todos sus miembros de modo que los veteranos inoculan misteriosamente ese maravilloso veneno a cuantos se van uniendo, permanezcan más o menos tiempo… ¿Me dirán que no suena a milagro?

No quiero pasar por alto los milagros personales. El actual director y alma mater del grupo en los últimos años es una persona que era incapaz de decir media palabra sin sonrojarse hasta el extremo, una de esas personas de no me mires que no estoy… En el grupo desde los orígenes, desde papeles muy pequeños, se ha convertido en un buen director, coordinador, organizador… Por no hablar de P., recién llegada al grupo este año. Al hacer la primera prueba encima del escenario rompió a llorar de vergüenza y fue incapaz de hacer nada. Me gustaría que ustedes la pudieran ver en escena bailando, interpretando, transmitiendo con una gran fuerza junto al resto de actores. Unos meses y un grupo humano han hecho que se produzca el milagro. Podría nombrar muchos otros a lo largo de estos años. Personas por las que nadie daba más duros de los necesarios e incluso ninguno. Personas que no destacaban sino todo lo contrario… Hablo de milagros, claro que lo hago…
Tampoco quiero olvidarme de los milagros grupales. Verán. A. dirige el grupo. Antes lo hizo junto a otros que por diversos motivos tuvieron que dejarlo. Sin embargo A. cuenta con un equipo de personas que le ayudan a dirigir cada ensayo. Algunas viven y están en Santander. Son gente del grupo de los más mayores y algunos incluso aún actores. Algunos viven fuera y los fines de semana que pueden se acercan a echar una mano. Desde Oviedo se han montado las coreografías. Desde Valladolid se han dado consejos, dirigido y creado escenografía, incluso desde la Escuela de Arte Dramático en la que se forma un exdirector y actor del grupo. Desde otros lugares se ha ayudado en matices, escenas. Desde Londres se ha apoyado la jugada…De pronto no hay una dirección sino un equipo multidisciplinar trabajando junto y siendo coordinado por A. para sacar adelante el montaje de este año… Y todos a una y con el mismo convencimiento y modo de hacer… ¿Me dicen que no hay milagros? Hace poco pude estar en un ensayo. Allí me encontré con algunos exmiembros del grupo que estaban viendo el ensayo general y que se quedaron hasta una hora tardía ayudando a montar luces, escalera va y escalera viene. Percibí en todos, miembros actuales y antiguos formantes algo curioso: No se contaron muchas cosas pero mirándose unos a otros a los ojos se transmitió mucha información sobre cómo andaba cada uno y cómo le iba la vida… Y para rematar, al borde del pre-estreno y estreno en los próximos días, como todos los años, no hay más que mensajes, llamadas, encuentros donde se percibe el ambiente de tensión y nervios que sería lógico en quien sale a escena pero no en quien lo mira ya desde lejos, quizá no pudiendo asistir ni a las representaciones… Créanme. Esto no son más que milagros…

Blancanieves Boulevard está a punto de levantar el telón. Saldrá bien. Esperemos que sea un éxito, pero el éxito ya está conseguido a base de milagros de andar por casa… Que sigan los milagros y la magia que el grupo se empeña en crear y transmitir año a año, siempre soñando: “Soñar, lo imposible, soñar. Vencer al invicto rival…” Aquella canción del Hombre de la Mancha, primer montaje que el grupo emprendió, y que quedó como lema latente de todos estos años… 

Dirán ustedes que me he vuelto un poco hereje con esta milagrería barata. Es posible pero admito que creo, firmemente y cada vez más, en todos esos milagros constatables. Por eso les pido su aplauso y su apoyo a este pequeño y humilde grupo de teatro que lo es, pero sobre todo, a este grupo de personas… 

Así pues solo me resta decir de corazón aquello de ¡mucha mierda!


Permítanme un apéndice pequeño pero es que el grupo de teatro de mi cole de siempre –El Colegio de Lourdes de Valladolid-, el Grupo Siluetas al que muchas veces vi de niño y adolescente, acaba de cumplir 35 años celebrándolo con su espectáculo recién estrenado: “Por amor al arte”. Un grupo en el que veo muchos de los rasgos descritos arriba y al que quiero también felicitar con mi aplauso y reconocimiento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario